Resumen:
El acuerdo de paz firmado entre el Gobierno de El Salvador y la insurgencia aglutinada en el Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional (FMLN) constituyó un acontecimiento de resonancia a escala mundial y un ejemplo de lo que se puede lograr con voluntad política; sin embargo, el haber hecho renacer en la población el sueño de una sociedad más justa, equitativa y encaminada hacia la búsqueda del bien común, pronto se fue convirtiendo en desencanto ante una realidad que hacía cada vez más precaria la vida de una gran mayoría de la población, de ahí nuestra hipótesis de trabajo “las instituciones responsables de la defensa de los derechos humanos han adolecido de unas creativas y claras políticas públicas para poder cumplir sus mandatos”, la cual hemos tratado de demostrar mediante un análisis basado en la integración sistemática de diferentes estudios sobre el tema, interpretados a través del marco teórico general de la filosofía política y el método comparativo en los aspectos jurídicos, empleando los ejes temáticos del modelo de evaluación institucional elaborado por el observatorio de la democracia en Centroamérica. Luego de 20 años, la contradicción entre el compromiso formal de cumplir lo mandatado en la Constitución y el modelo impulsado, ha legado una crítica situación económica y social, con la consecuente crisis de gobernabilidad asumida por un gobierno de izquierda, suceso sin precedentes en el país dentro de su larga historia política.