Abstract:
Desarrollar y difundir conocimiento de alto nivel académico constituye una de las aspiraciones fijadas en la misión de la Universidad Tecnológica de El Salvador; y consecuente con dicho propósito, quiere ser una institución reconocida por la calidad de su educación. Misión y visión engarzadas así en torno al tema de la educación y el conocimiento responden a una de las razones de ser, comúnmente aceptada, de este tipo de instituciones: formar profesionales críticos, de tal manera que puedan contribuir al crecimiento y a los cambios que requiera la sociedad. En sociedades donde la ignorancia y la injusticia van a galope tendido, no cabe duda de que formar personas críticas se vuelve una acción pedagógica de primer orden. Esto implica una constante revisión y transformación de la educación. Muy a menudo se escucha y se lee que una educación que fomenta la adaptación, la memorización y la repetición antes que el ejercicio del pensamiento crítico, más que formar, deforma y se vuelve nociva; sobre todo, porque educa para el consumo, la imitación, la pasividad y la complacencia. Ahora bien, si la mayoría de instituciones educativas pretende efectivamente formar profesionales críticos, resta averiguar, establecer o determinar cómo es que esa aspiración se va materializando o realizando en el proceso enseñanza aprendizaje, y si tales instituciones tienen claro en qué consiste eso que se da en llamar "pensamiento crítico".