Abstract:
Al comenzar el siglo XX, la agricultura y la producción artesanal características del siglo anterior mantienen su predominio, sin embargo, en los países occidentales se inicia un proceso de industrialización con nuevas técnicas sin precedentes en la historia. A partir de 1896-1897, la economía occidental comienza a expandirse, basada en el aumento en el número de consumidores, en un crecimiento de las inversiones, así como en el aparecimiento de nuevas tecnologías, modificando los antiguos patrones de producción. Es así como empieza a desarrollarse la producción de acero, la electricidad, la generación de petróleo con fines productivos y la industria basada en la química orgánica.