Abstract:
Primero, para ubicarnos mejor, hablemos un poco sobre el fenómeno de las maras. Tradicionalmente la mara en El Salvador había sido un movimiento de la rebeldía típica del adolescente joven que manifestaba su celo y rivalidad ante el orden, esto era más obvio, en los momentos de confrontación deportiva. Pero a ese nivel no generaba ningún problema. La problemática surge cuando se da el salto cualitativo de lo que fueron las maras a lo que hoy son las pandillas, y esta situación se origina cuando llegan los primeros deportados de Estados Unidos. Bajo ese contexto es que el perfil de la mara cambia radicalmente. Ese cambio en algunas mentalidades salvadoreñas no se tiene claro, todavía se remite a la imagen que se tenía de las maras, esas peleas que siempre se han dado, las hay, seguirán dándose; esas rivalidades colegiales, típicas de la adolescencia frente al orden, a lo establecido, porque ellos quieren sacar su personalidad, pero en ese entorno de mara juvenil, el fenómeno de las pandillas actuales no tiene nada que ver. Porque, una cosa es la semilla y otra cosa es la tierra, la semilla nos vienen desde afuera del exterior.